Hay personas que dicen ser verdaderos fanáticos de sus equipos de fútbol y otros que en realidad lo demuestran.
Tal es el caso de un hombre sueco, el cual viajó más de 1,200 kilómetros para ver al "equipo de sus amores", el Gefle, un club que milita en la Primera División del fútbol sueco y que había ganado un encuentro por última vez el 5 de agosto.
Nadie estaba dispuesto a recorrer tantos kilómetros para volver a verlos perder, pues tenían una muy mala racha, pero a este hombre nada le importó y los siguió hasta la tribuna del estadio rival.
Todo esfuerzo tiene su recompensa y este verdadero fanático pudo celebrar un gol anotado por su equipo junto a todos los jugadores, pues ellos se dirigieron directamente hacia donde él estaba para celebrar juntos, reconociendo su esfuerzo.
Lo mejor de todo es que el equipo precisamente ganó 1-0 al Kalmar por la jornada 28 del torneo local y esto le servirá tanto de lección a los otros "fanáticos" como de esperanzas a los jugadores, pues el siguiente juego es ante el Malmö, actual campeón de dicha liga.
Tal es el caso de un hombre sueco, el cual viajó más de 1,200 kilómetros para ver al "equipo de sus amores", el Gefle, un club que milita en la Primera División del fútbol sueco y que había ganado un encuentro por última vez el 5 de agosto.
Nadie estaba dispuesto a recorrer tantos kilómetros para volver a verlos perder, pues tenían una muy mala racha, pero a este hombre nada le importó y los siguió hasta la tribuna del estadio rival.
Un mercoledì da leoni! I giocatori del Gefle festeggiano la vittoria con l'unico sostenitore che era presente nella trasferta a Kalmar pic.twitter.com/kZpgMW6W5z— Andrea Poma (@andpom147) 27 de octubre de 2016
Todo esfuerzo tiene su recompensa y este verdadero fanático pudo celebrar un gol anotado por su equipo junto a todos los jugadores, pues ellos se dirigieron directamente hacia donde él estaba para celebrar juntos, reconociendo su esfuerzo.
Lo mejor de todo es que el equipo precisamente ganó 1-0 al Kalmar por la jornada 28 del torneo local y esto le servirá tanto de lección a los otros "fanáticos" como de esperanzas a los jugadores, pues el siguiente juego es ante el Malmö, actual campeón de dicha liga.
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